Las nuevas Tecnologías de
la Información y la Comunicación han realizado indirectamente un cambio
progresivo pero rápido que está transfigurando la imagen y la realidad de los
medios, su papel social, sus modelos de negocio, sus metodologías y sus
estrategias, en su misma esencia.
El campo de la
Comunicación que mayor crecimiento ha experimentado en los últimos años es el
vinculado con el multimedia. El desarrollo de este tipo de productos, como el
mercado de consumo, ha crecido de una manera exponencial. Todos los indicadores
hacen presuponer que se trata de una tendencia a alza para los próximos años.
Parece existir un cierto
consenso de facto acerca de una serie de tópicos relacionados con la evolución
de los medios tal como la entendemos, como la fragmentación de las audiencias,
la proliferación de contenidos generados por los usuarios, así como la
composición personalizada de la “programación” bajo demanda.
En este nuevo paradigma
global de producción y acceso a la información, las industrias del conocimiento
y los modelos que las soportan están asistiendo a grandes cambios. En el sector
de la comunicación, por citar un primer ejemplo, han nacido nuevos modelos como
el periodismo mashup. El contenido utilizado es típicamente usado de terceros a
través de una interfaz pública o usando un API. Según el estudio de
Santiago Tejedor sobre la materia: “El denominado «periodismo mashup» estaría
inspirado en esta construcción de engranajes que articulan en un solo producto
(en este caso, con finalidad estrictamente informativa) diferentes servicios de
la red, otorgándoles de este modo un nuevo sentido y una nueva utilidad. En
este caso, el periodista no genera contenidos, sino que su tarea se centra en
la construcción de itinerarios o de «rutas» de naturaleza hipertextual que
conducen a contenidos online ya existentes en otras plataformas colaborativas.”